Recomendaciones y directrices a tener en cuenta en las parroquias y congregaciones de la Iglesia Española Reformada Episcopal a consecuencia de la propagación del coronavirus.
En relación a la participación en los servicios religiosos dominicales y otros encuentros parroquiales.
El próximo domingo, al inicio del oficio propio, se anunciará que,
en orden a la prudencia y a la preocupación de muchos fieles a los contagios:
Evitemos situaciones que puedan dar lugar a la propagación del
coronavirus, como el contacto físico, al principio y al final de las celebraciones, el momento de comunicarse “la Paz”, donde bastará una sonrisa o una leve inclinación de cabeza para saludarse.
En relación a la participación en la Santa Comunión es importante indicar que, aunque es un derecho de los fieles participar del cáliz, se recomienda que mientras dure la epidemia de coronavirus los fieles que deseen comulgar del cáliz lo hagan mojando la porción del pan consagrado en el cáliz. En cualquier caso, los cálices de metal y vidrio impiden que se fijen los virus y bacterias; por otra parte, el uso del vino elimina el virus que, según informan los médicos, vive principalmente en el epitelio del sistema respiratorio humano y es muy sensible al agua con jabón o al alcohol.
Por esta razón es recomendable el uso de vino con alcohol en las celebraciones eucarísticas.
Los rectores y ministros encargados de las parroquias, comunicarán a las personas que tienen la responsabilidad de preparar los elementos de la Santa Comunión que deben usar vino natural con graduación alcohólica.
En cuanto a la costumbre muy extendida en nuestras parroquias de que el ministro salude a los fieles al final de la celebración en la puerta, se ruega se sigan las mismas indicaciones para evitar el contacto físico.
Se ruega actuar con prudencia y siguiendo las indicaciones generales de las autoridades sanitarias.
Muchas gracias por su colaboración.
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