Un informe de la
Cámara de Obispos sobre el matrimonio y las relaciones entre personas del mismo
sexo ha sufrido un importante revés en una votación en el Sínodo General de
Londres. Es un vergonzoso rechazo simbólico del informe de los Obispos, que
había declarado que no debería haber cambios en la enseñanza de la iglesia, al
tiempo que pedía un "tono fresco" en los temas.
Hablando antes de la votación, el Arzobispo de Canterbury
dijo que creía apasionadamente que el informe que había sido trabajado y con el
que luchaba era una hoja de ruta y prometió que la iglesia encontraría una
nueva "inclusión".
Sin embargo, muchos oradores en el debate dijeron que el
informe no era lo suficientemente claro o no lo suficientemente lejos. Después
del debate, se realizó una votación "Take Note"; Es un movimiento
neutral que permite al Sínodo discutir el contenido y las recomendaciones de un
informe sin comprometer el Sínodo a la aceptación formal del mismo. Sin embargo
se perdió el voto de "tomar nota", porque necesitaba una mayoría en
las tres Cámaras del Sínodo - los Obispos, el Clero y los Laicos y fue
derrotado en la Cámara de Clérigos, que votó NO tomar nota por 100 Votos a 93.
Respondiendo a la votación, el reverendo Graham Jones,
obispo de Norwich, dijo: "Puedo garantizar que la Cámara de Obispos
considere cuidadosamente y en oración todas las contribuciones hechas en el
debate de hoy ... no hay una respuesta simple y fácil a Esta cuestión más allá
de comprometerse con el compromiso mutuo cuando las opiniones sobre lo que
debemos hacer están profundamente disputadas ".
Anteriormente, el Obispo James había reconocido
"diferencias significativas de opinión dentro de la Cámara de Obispos
sobre las relaciones entre personas del mismo sexo" y que el informe no
había recibido una recepción "entusiasta" en todos los lugares;
Expresó su pesar por cualquier "dolor o enojo que pueda haber
causado". Señaló la "tensión que puede existir entre nuestra
determinación de mantener firmemente la enseñanza sobre el matrimonio y las
relaciones sexuales tal como se expresa actualmente en nuestros Cánones y el
compromiso de afirmar el lugar De las personas LGBTI dentro de la iglesia .....
para permitir que sus voces sean escuchadas ".
Durante el debate, varios oradores pidieron una mayor
claridad. "El mismo viejo, el mismo viejo" dijo uno de los oradores.
"Profundamente defectuoso" dijo otro y "hay una necesidad de una
bienvenida radical para todos". Un orador gay dijo que la gente quería que
la iglesia avanzara más rápido y pidió a los Obispos que pensaran de nuevo -
sus palabras fueron calurosamente aplaudidas. El decano de Southwark, el Rev.
Andrew Nunn, dijo a los obispos: "Usted habla de un nuevo tono - pero no
me gusta el tono: usted puede hacer mucho mejor. Los obispos no podemos tener
un poco de orgullo en nuestros miembros LGBT y más reconocimiento de la
bendición que los homosexuales traen a nuestras iglesias? "Otra vez,
aplausos fuertes y prolongados. Sin embargo, algunos miembros evangélicos del
Sínodo también expresaron preocupación, temiendo que el informe de los obispos
fuera un ablandamiento de las directrices sobre la moralidad sexual.
Respondiendo a todos los comentarios, el arzobispo Justin
dijo que los obispos seguirían pensando: "no podemos dejar de hacerlo a la
luz de lo que se ha dicho en el debate".
Anteriormente, el obispo James había trazado la historia
reciente de la Iglesia de Inglaterra sobre temas de sexualidad, diciendo que
había estado discutiendo las relaciones del mismo sexo durante más de cuarenta
años de ministerio ordenado. Abordó la dificultad de las cuestiones; "Yo
estaría engañándolo si no confesaba que estaba en conflicto al presentar este
informe, pero en eso creo que estoy lejos de estar solo entre los obispos y en
la Iglesia anglicana de Inglaterra ... nuestra propia historia al tratar con
estos También explica por qué la gente de todas las partes del debate rara vez
se encuentran satisfechos ". Dijo que en un nivel nada parecía haber
cambiado desde que hizo una presentación sobre la cuestión de las relaciones
homosexuales en la década de 1970, pero en otro nivel" todo parece Han
cambiado, especialmente en la cultura más amplia ".
El obispo de Willesden, el reverendo Pete Broadbent, dijo
que este debate sería "una fuente continua de desacuerdo porque no nos
hemos unido en torno a un punto final. Cuando legislamos para que las mujeres
fueran obispos, incluso los que se opusieron llegaron a la conclusión de que la
Iglesia de Inglaterra debía hacer posible que las mujeres fueran obispos en la
Iglesia de Dios según nuestros cánones y formularios. En este debate ni
siquiera hemos empezado a encontrar un lugar donde podamos unirnos. El Informe
Episcopal reconoce un lugar de partida. Se necesita más conversación.
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